LOS VERDUGOS HAN LLEGADO
Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir.
Y
he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que
mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para
destruir.

Y
la gloria del Dios de Israel se elevó de encima del querubín, sobre el
cual había estado, al umbral de la casa.

y llamó Jehová al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce.


Aconteció
que cuando ellos iban matando y quedé yo solo, me postré sobre mi
rostro, y clamé y dije: !!Ah, Señor Jehová! ¿destruirás a todo el
remanente de Israel derramando tu furor sobre Jerusalén?
LA SEÑAL A LOS HOMBRES DE ORACION
y le dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.

Y a los otros dijo, oyéndolo yo:
Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia.

Matad
a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede
ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os
acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, desde los
varones ancianos que estaban delante del templo.
Y les dijo: Contaminad la casa, y llenad los atrios de muertos; salid. Y salieron, y mataron en la ciudad.
PASTORES QUE TRATARON DE FORZAR LA MANO DE DIOS MUEREN POR EL JUICIO DE JEHOVA CORONAVIRUS

Y
he aquí que el varón vestido de lino, que tenía el tintero a su
cintura, respondió una palabra, diciendo:
He hecho conforme a todo lo que me mandaste.!!
Mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia; haré recaer el camino de ellos sobre sus propias cabezas.
JEHOVA !!